Resumen del Artículo
- El estreñimiento es común durante el embarazo, pero no tienes que sufrir
- 5 causas comunes de estreñimiento en el embarazo
- Compartimos 6 remedios caseros seguros, naturales y de bajo costo que puedes probar
- Si consideras que necesitas un ablandador de heces, debes hablar con tu médico
- Si tienes otros problemas digestivos constantes, habla con tu médico de inmediato
¿Estreñida durante el embarazo? 6 remedios caseros naturales
Si estás embarazada y sufres de estreñimiento, no te preocupes, es normal. Los cambios que tienen lugar en el cuerpo de una mujer embarazada contribuyen a la aparición del estreñimiento. Afortunadamente, hay muchos remedios caseros seguros y naturales que alivian el estreñimiento y que también son seguros para el bebé.
¿Qué causa el estreñimiento en el embarazo?
El estreñimiento en el embarazo puede ocurrir por muchas razones. La progesterona, hormona del embarazo, es en gran parte culpable. Tu cuerpo la libera para prepararse para el parto y uno de sus efectos secundarios es que relaja los intestinos. En consecuencia, los alimentos se mueven más lentamente por el tracto digestivo y esto ralentiza la velocidad con la que se van, con lo que la probabilidad de que te estriñas aumenta.
A menudo, los efectos de la progesterona empiezan a aparecer hacia el final del primer trimestre, en el segundo o tercer mes. Sin embargo, la progesterona no es la única razón. Otras razones por las que te puedes estreñir durante el embarazo son:
- Suplementos de hierro. Algunas mujeres necesitan aumentar sus niveles de hierro durante el embarazo, y una de las formas más sencillas de hacerlo es mediante los suplementos de hierro, pero estos pueden causar estreñimiento.
- Menos actividad. Sentirte cansada. No poder hacer tanto ejercicio. Movimientos incómodos, especialmente a medida que el embarazo avanza. Todo esto puede tener un impacto significativo en qué tan activa estás y cuánto ejercicio realizas. Un menor movimiento contribuye al estreñimiento.
- El útero que se agranda. A medida que tu bebé crece y tu útero se expande, los demás órganos de tu cuerpo se comprimen. Un menor espacio, especialmente con músculos intestinales relajados, puede ocasionar menos evacuación intestinal.
- Estrés, preocupación y ansiedad. La preocupación y la ansiedad son sentimientos completamente normales en una madre embarazada. Este estrés es una causa conocida del estreñimiento.
- Fibra insuficiente en la dieta. La dieta occidental moderna es notoriamente baja en fibras naturales que ayudan a mantener los intestinos activos y en movimiento. Una dieta alta en alimentos procesados y refinados es una causa común de estreñimiento en todos los adultos, no solo en las mujeres embarazadas.
Por supuesto, si el estreñimiento sucede con frecuencia durante el embarazo, vale la pena preguntar ¿qué se considera normal?
Evacuaciones intestinales en el embarazo: ¿qué se considera normal?
Una ralentización de la función intestinal después del segundo o tercer mes es normal. En un estudio se encontró que un 75% de las mujeres indicaron tener irregularidad intestinal en su evaluación del primer trimestre.
La salud y el movimiento intestinal varía de una mujer a otra, y quizás hasta de un embarazo a otro en la misma mujer. Se pueden desarrollar ciertas intolerancias alimentarias durante el embarazo y provocar diarrea, que es lo contrario al estreñimiento.
Lo que se considera normal puede ser la ralentización de la función intestinal, pero a fin de cuentas, cada embarazo es único.
Remedios caseros naturales y seguros para el estreñimiento en el embarazo
Tienes que tener cuidado con lo que comes y haces cuando estás embarazada. En ocasiones, las restricciones pueden ser agobiantes. La buena noticia es que lidiar con el estreñimiento no tiene que ser una de ellas.
Cualquiera de estos remedios naturales para el estreñimiento por lo general cumple con las sugerencias para mantenerte a ti y a tu bebé sanos, en cuanto a dieta y estilo de vida se refiere. Por supuesto, si tienes preguntas, debes consultar siempre a tu médico.
1. Bebe agua
Un vaso de agua ayuda a ablandar las heces y a facilitar el paso de las evacuaciones intestinales. Si el agua no es de tu agrado, puedes beber también agua detox, jugos o caldos de verduras. Un “té” tibio de limón (agua tibia con medio limón fresco exprimido) puede ayudar a poner de nuevo todo en movimiento, ya que los cítricos estimulan las evacuaciones intestinales. Sin embargo, debes evitar los jugos azucarados, pues tienen un impacto importante en el azúcar de la sangre. Si bebes jugos, que sean jugos frescos que aún contengan la fibra vegetal (sin colar).
La recomendación general para una buena salud es beber de 8 a 10 vasos de agua o líquidos al día (8 onzas).
2. Obtén más fibra dietética
Los alimentos naturales y crudos con alto contenido de fibra ayudan a facilitar el paso de las heces y, además, provienen de alimentos que contienen los nutrientes que necesitas cuando estás embarazada. Los valores diarios recomendados de fibra son entre 25 y 35 gramos al día. Nuestros antepasados comían mucho más que eso, por lo que en vez de seguir otra métrica, solo enfócate en comer alimentos ricos en fibra.
Las frutas tienen un alto contenido de fibra. Las verduras frescas, también. Además, puedes comer granos integrales, verduras de hoja verde y legumbres, como guisantes y garbanzo.
3. Come ciruelas pasas o bebe jugo de ciruela pasa
Las ciruelas pasas contienen fibra. También contienen sorbitol, un azúcar vegetal con propiedades laxantes. Y las investigaciones muestran que las ciruelas pasas funcionan mejor que muchos laxantes comunes, además de ser más seguras.
Puedes comer entre 6 y 7 ciruelas pasas para problemas persistentes, o menos, si solo buscas mantener un movimiento regular. Beber jugo de ciruela pasa también funciona para muchas personas.
Cabe señalar que las ciruelas pasas son una fuente de hierro, por lo que debes tener esto en cuenta si tomas un suplemento de hierro.
4. Añade alimentos probióticos a tu dieta o suplementos de probióticos si es necesario
Los alimentos probióticos como chucrut, miso y tempeh ayudan a estimular la digestión y a liberar esas bacterias benéficas que viven en el tracto digestivo, con lo cual favorecen la digestión y la absorción de nutrientes. Entre los muchos beneficios de los probióticos, también te ayudan a tener evacuaciones regulares.
Los suplementos alimenticios de probióticos por lo general se reconocen como seguros. Si deseas tomar un suplemento de probióticos, habla con tu médico para confirmar cuál es el mejor para ti.
5. Haz ejercicio moderado
El ejercicio, incluso el movimiento moderado como una caminata placentera, puede ayudar en gran medida a acabar con el estreñimiento. La actividad estimula la digestión y el movimiento intestinal y ayuda a relajar el cuerpo para facilitar el paso de las heces.
6. Haz tus ejercicios de Kegel
Estos ejercicios del suelo pélvico, que probablemente tu médico te recomendó practicar, no solo ayudan durante el parto, también ayudan a tener evacuaciones regulares durante el embarazo.
¿Es seguro tomar laxantes durante el embarazo?
Algunos médicos pueden recomendar algunos ablandadores de heces o laxantes a sus pacientes, como leche de magnesia. Varios estudios indican que puede haber un riesgo con algunos laxantes o ablandadores, por lo que es mejor hablar primero con tu médico. Las opciones naturales como el agua, el ejercicio y la fibra pueden ser las maneras más seguras, sencillas y económicas de limitar el riesgo de estreñimiento y asegurar que estés obteniendo todos los nutrientes que necesitas durante el embarazo.
Cuándo ir con el médico
Si no puedes acabar con un episodio de estreñimiento, debes consultar a tu médico. La diarrea frecuente es también un signo de advertencia de que deberías hablar con tu médico, ya que la deshidratación se vuelve un problema importante si dicho síntoma persiste.
Finalmente, la mejor respuesta es que siempre debes consultar a tu médico respecto a cualquier inquietud que tengas durante el embarazo. En general, cualesquiera de los remedios caseros arriba mencionados para aliviar el estreñimiento representan formas naturales y accesibles de resolver un problema que es demasiado común durante el embarazo.
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