¿Qué es el colágeno?
El colágeno es la proteína más abundante en tu cuerpo. Se encuentra en todo tu sistema, desde ligamentos y tendones hasta cartílagos, ojos y vasos sanguíneos. Al ser uno de los componentes más importantes de tus huesos, piel y cabello, es una buena idea aprender cómo aumentar el colágeno en tu cuerpo. Al constituir cerca del 75% del peso seco de tu piel, el colágeno es sin duda un factor esencial en la salud de la piel. El colágeno da a tu piel su brillo saludable y fortalece tus huesos, dientes y tejidos conectivos.
Qué sucede cuando los niveles de colágeno disminuyen
A medida que envejecemos, la síntesis de colágeno disminuye y se deteriora en alrededor del 75% entre las edades de 30 y 80 años. Con la exposición solar por tiempo prolongado, el daño solo aumenta. Todos sabemos lo que sucede después:
- La piel pierde elasticidad y se vuelve arrugada y semejante al crepé.
- Los músculos se encogen y se debilitan.
- Los ligamentos y tendones se ponen rígidos.
- El revestimiento del tracto digestivo puede disminuir, lo que trae como consecuencia problemas gastrointestinales.
- El riesgo de sufrir osteoartritis aumenta.
Afortunadamente, hay acciones que puedes tomar para aumentar de forma natural el colágeno en tu cuerpo. Algunas excelentes fuentes alimenticias productoras de colágeno te ayudan a mantenerte sano por más tiempo, y las investigaciones muestran que las cremas con colágeno, las bebidas de colágeno y los suplementos de colágeno también pueden funcionar.
Los mejores alimentos para aumentar el colágeno
Seguir una dieta vegetariana balanceada, con abundantes frutas y verduras frescas y granos enteros, es la mejor manera de ayudar a tu cuerpo a producir la máxima cantidad de colágeno. La vitamina C y el zinc son de particular importancia.
Frutas del bosque
La vitamina C juega un papel importante en la producción de colágeno y, por lo tanto, es fundamental obtenerla en tu dieta en cantidades suficientes si deseas incrementar la producción de colágeno. La vitamina C se encuentra notoriamente en los cítricos como la naranja y la toronja, pero las frutas del bosque como el kiwi, la grosella negra, la fresa y la cereza también están llenas de esta vitamina.
Pimientos y otras verduras
Los pimientos de todos los colores están repletos de vitamina C formadora de colágeno, al igual que las verduras de hoja verde como las espinacas, el brócoli y las coles de Bruselas. ¡Hasta en una papa horneada mediana puedes obtener el 19% del valor diario!
Granos enteros
Un mineral que es esencial para la producción de colágeno es el zinc. El zinc se encuentra en grandes cantidades en granos enteros como la pasta y el arroz integral. Los frijoles y las nueces como los anacardos y las almendras también están repletos de este nutriente vital.
Ginseng
Ciertos estudios indican que incluir ginseng en tu dieta puede ayudar a combatir la piel arrugada. Sumerge unas rodajas en agua caliente para obtener un té relajante de ginseng, o añádelo a la sopa de la misma manera como usas el jengibre.
Ácido hialurónico
Los alimentos a base de soya, incluidos tofu, salsa de soya, tempeh, natto y miso, todos contienen niveles altos de ácido hialurónico, un compuesto que promueve la producción de colágeno y ayuda a mantener la piel saludable. Asegúrate de consumir productos de soya fermentada, ya que estos no tienen las toxinas que tienen los alimentos de soya no fermentada. Las verduras de hoja verde y los tubérculos ricos en almidón como camote, nabo, cebolla y alcachofas de Jerusalén también son buenas fuentes.
Esteroles de Aloe Vera
Los suplementos de esteroles de aloe se han relacionado con una mejoría en la textura de la piel expuesta al sol y han demostrado aumentar la elasticidad de la piel. También es posible que tengan efectos antioxidantes y antiinflamatorios. El esterol de aloe viene en varias formas, desde jugo de aloe vera hasta alimentos fortificados, pero la forma más fácil de tomarlo es en cápsula.
Algas
Las algas son ricas en proteínas y aminoácidos que son necesarios para la producción de colágeno, pero no contienen colágeno por sí solas. Hay pruebas de que las algas marinas contienen metabolitos, incluidos aminoácidos, polifenoles y pigmentos, que pueden usarse para combatir el envejecimiento de la piel cuando se toman como suplementos.
Carotenoides
Los carotenoides provienen de varias fuentes coloridas de origen vegetal, incluidas las zanahorias, los mangos, las naranjas y los tomates. Tomados por vía oral, el extracto de col rizada rico en carotenoides y otras formas de suplementos de carotenoides han demostrado mejorar la apariencia de la piel y prevenir la degradación del colágeno.
¿Funcionan las cremas con colágeno?
No hay duda de que, a medida que envejecemos, la piel tiende a resecarse conforme la producción de colágeno disminuye. Pero si bien es cierto que las cremas y lociones pueden humectar, ¿pueden ayudar realmente las cremas tópicas a tu cuerpo a producir más colágeno en grandes cantidades? Ciertamente parece que sí, pero asegúrate de adquirir tus productos sabiamente. Tanto los retinoides como los péptidos han demostrado funcionar.
Retinoides
Tu cuerpo toma retinoides (formas de vitamina A) de forma natural de los alimentos. Los retinoides se usan comúnmente en los productos para el cuidado de la piel porque han demostrado reducir las arrugas cuando se usan durante cierto período de tiempo. Un estudio mostró que tanto los tratamientos con ácido retinoico como con retinol (ambos tipos de retinoides) pueden aumentar el espesor de la piel e incrementar la producción de colágeno, con el retinol, y reducir las arrugas faciales después de 12 semanas.
Péptidos
Los péptidos son los componentes básicos de las proteínas. Como el colágeno es una proteína, es lógico pensar que aplicar péptidos a tu piel puede ayudar a aumentar el colágeno. Un estudio reciente encontró que la combinación de péptidos tópicos y suplementos orales tuvo como resultado una mejor apariencia de la piel al cabo de un mes.
Exfoliación química
Si bien es cierto que las exfoliaciones químicas pueden estimular la producción de colágeno y mejorar la apariencia de tu piel, solo tienden a funcionar en las capas más superficiales. Esa es probablemente la razón por la que la mayoría de los expertos recomiendan que te hagas una exfoliación química cada 6 a 10 semanas. Las exfoliaciones químicas pueden salir mal y causar cicatrices, infecciones de la piel y cambios en el color de la piel. En pocas palabras, las exfoliaciones químicas pueden funcionar, pero no son sostenibles, son posiblemente peligrosas y ciertamente no son baratas.
Filtro solar
El filtro solar es probablemente lo más importante que debes usar. Aunque no revertirá la degradación de colágeno que ya ha sucedido, el filtro solar te permitirá cuidar el colágeno que aún tienes. La American Cancer Society (Sociedad Estadounidense contra el Cáncer) recomienda usar un filtro solar con protección de amplio espectro y con FPS de 30 o más. Elige un producto de buena calidad, libre de parabenos dañinos. El óxido de titanio o el óxido de zinc son ingredientes naturales perfectamente eficaces.
¿Funcionan las bebidas o suplementos de colágeno?
Si sigues una dieta saludable rica en nutrientes, probablemente no necesites preocuparte por el colágeno. Pero hay algunas pruebas de que las bebidas de colágeno pueden ayudar a tu cuerpo a producir más colágeno y dar lugar a un cutis más firme. Para que tu intestino pueda absorberlas, las moléculas en las bebidas de colágeno necesitan haber sido hidrolizadas (descompuestas en péptidos). Las bebidas de colágeno se elaboran con productos de origen animal como bovino, porcino o pescado. Ya que elementos tóxicos, como los metales pesados, tienden a acumularse en los huesos y tejidos conectivos de los animales, también puedes considerar complementar tu dieta con los nutrientes que tu cuerpo necesita para producir su propio colágeno, en vez de utilizar fuentes de origen animal. Pero si deseas probar los suplementos de colágeno, se ha mostrado que tienen efectos positivos en la apariencia de la piel. Se cree que hacen esto al transformarse en aminoácidos en el intestino y al ser después absorbidos de nuevo en la circulación sanguínea. Hay varias opciones en el mercado. Busca empresas que obtengan los huesos y tejidos de fuentes de cría al aire libre, sin jaulas, libres de metales pesados y libres de antibióticos. Busca una marca confiable que contenga una etiqueta de certificación de terceros como NSF o USP. También puedes comunicarte con las empresas para ver qué hacen para mantener sus productos libres de contaminantes y qué tipos de pruebas realizan.